REDES SOCIALES: UN APORTE A LA ENSEÑANZA DE LA LECTURA CRÍTICA
SOCIAL NETWORKS: A CONTRIBUTION TO THE TEACHING OF CRITICAL READING
DOI: https://doi.org/10.33539/educacion.2021.v27n1.2365
Esta obra está bajo licencia internacional https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Fecha presentación: 14-03-21
Fecha aceptación: 03-06-21
CÓMO CITAR:
Pinto Maldonado, L. K. (2021). Redes sociales: un aporte a la enseñanza de la lectura crítica. Educación, 27(1), 73-77. https://doi.org/10.33539/educacion.2021.v27n1.2365
RESUMEN
Este
artículo pone de manifiesto cómo las redes sociales se
han convertido en parte de la vida del ser humano, centrándose
su desarrollo especialmente en los estudiantes universitarios quienes
han nacido en la era digital. En este contexto, el campo lector es un
ámbito que se ha visto en la necesidad de evolucionar y
adecuarse a un nuevo mundo marcado por el avance de la
tecnología, generando con ello el nacimiento de los booktubers y
bookstagrammers quienes hoy por hoy son los analistas favoritos de
jóvenes lectores. Es necesario,tener en cuenta que los tipos de
textos que fomentan estos creadores de contenido son limitados, pues en
su mayoría, solo se centran en ofrecer reseñas de
literatura infantil o juvenil, muy pocos tienen apertura al desarrollo
de la lectura crítica, esto amerita una problemática
porque encasilla a los estudiantes en lo convencional. Por lo tanto, se
considera importante cambiar esta realidad, utilizando esta
tecnología de la información, que ya es exitosa en las
redes sociales, pero esta vez, con la intervención del
profesional docente quien, desde su posición en la
educación superior, puede aportar estrategias novedosas para
guiar el desarrollo y la producción de recursos educativos, con
el fin de mejorar la calidad de información y el tratamiento de
la lectura crítica.
PALABRAS CLAVE:
Redes sociales, lectura crítica, recursos educativos, estrategias, educación superior.
ABSTRACT
This
article shows how social networks have become part of the life of any
person and even more so in university students who have been born in
the digital age. Under this context, the reading field has seen the
need to evolve and adapt to the world in which it faces, which is why
the booktubers and bookstagrammers were born, who today are the
favorite analysts of young readers. It is necessary to bear in mind
that the types of texts that these content creators promote are
limited, since most of them only focus on offering reviews of
children’s or young people’s Literature, very few are open
to the development of critical reading, this merits a problem because
it pigeonholes students to the conventional. Therefore, it is
considered important to change this reality, using this information
technology that is already successful in social networks, but this time
with the intervention of the teaching professional who from his
position will contribute with novel strategies to guide the development
of this production of educational resources in order to improve the
quality of information and the treatment of critical reading.
KEYWORDS:
Social networks, critical reading, educational resources, strategies, higher education.
INTRODUCCIÓN
Para
Vargas (2020) hoy en día existe una gran variedad de recursos
tecnológicos digitales que están a la disposición
de cualquier estudiante; esta realidad ha impulsado a los docentes a
analizar la producción de los múltiples materiales
existentes, con la finalidad de aprovecharlos, de la manera más
conveniente, en las
diversas situaciones
de enseñanza
aprendizaje.
Más
aún si se considera que una educación de calidad debe
promover una formación integral que impulse a los estudiantes a
desenvolverse en un mundo globalizado, propósito que se ha
estado trabajando de forma exhaustiva durante los últimos
años. Sin embargo, la educación requiere de recursos o
herramientas diversas para estar a la vanguardia y, entre ellas, se
encuentran las redes sociales.
Al
respecto, Guillen (2019) menciona que si bien, la utilidad que se le da
a las redes sociales, en su mayoría, está destinada a la
recreación de las personas, hay un sector poblacional que las
utiliza como un camino de aprendizaje.
En
esta línea, una actividad que se puede potenciar con la
inclusión de las redes sociales es la lectura crítica,
actividad que es de suma relevancia en el mundo universitario. Ochoa y
Moreno (2019) plantean que lograr una lectura crítica implica un
alto nivel de comprensión y razonamiento de la
información expresada, por lo que se entiende haber superado
todos los niveles impuestos en el análisis de textos. A partir
de esto, surge la cuestión: si la lectura crítica es
necesaria y de calidad, ¿por qué hasta hoy los
jóvenes no le prestan la atención correspondiente?
Dar
respuesta a esta interrogante, exige revisar las rutas que se
están siguiendo para el desarrollo de esta habilidad, ¿es
acaso un error promover la práctica lectora solo con libros o
revistas? ¿por qué no se puede hacer uso de las redes
sociales para difundir esta actividad?
Surge
aquí la figura del docente como principal responsable en la
propuesta y aplicación de estrategias innovadoras, orientadas a
fomentar y aplicar actividades como la lectura crítica,
considerando, por supuesto, el contexto en el que se despliega el acto
educativo.
Al
respecto, Henrie et al. (citado en Uriquidi et al, 2019) mencionan que
el uso de las nuevas tecnologías no garantiza que el aprendizaje
se realice con éxito; ya que este no es un proceso pasivo sino
activo; lo que se busca es acompañar con herramientas
innovadoras al estudiante para fomentar su autonomía y lograr
que se haga responsable de sus propios aprendizajes. Del mismo modo, el
docente buscará guiar este proceso, a fin de lograr el objetivo
de formar a los estudiantes como lectores críticos.
En
este contexto, el presente artículo se ha elaborado con el
objetivo de difundir nuevas herramientas y estrategias de
enseñanza, para que los docentes se sientan comprometidos a
involucrarse en el desarrollo de la criticidad de sus discentes, a
partir del entorno virtual en el que se desenvuelve el estudiante
universitario.
Importancia de la lectura crítica en la vida universitaria
La
adaptación a la vida universitaria puede convertirse en un
problema para quien no sea capaz de cumplir con las exigencias dadas
bajo este contexto. Los estudiantes que logran tener los resultados
más exitosos son los que desarrollan habilidades críticas
y de argumentación.
Para
Farlona y Fuentes (2019) el pensamiento crítico es necesario
para desarrollar el nivel argumentativo, de esta manera, el estudiante
universitario será capaz de sostener y articular ideas
coherentes en un intercambio oral o escrito. Pero cómo
desarrollar el pensamiento crítico si el estudiante no es capaz
de enfrentarse a lecturas que lo inviten a reflexionar y opinar
basándose en razonamientos lógicos. Lobato (2019)
manifiesta que existe una clara dificultad en los universitarios frente
a los textos académicos, debido a las deficiencias en la
comprensión lectora y al insuficiente uso de estrategias que les
permitan desarrollarla. Considerando esta realidad, el docente tiene la
opción de proponer nuevas formas o recursos, como las redes
sociales, para impulsar el pensamiento crítico.
Ventajas de las redes sociales como material educativo
Ante
la necesidad de estar a la vanguardia con el mundo, se requiere
actualizar estrategias de enseñanza que incluyen a las redes
sociales como herramientas fundamentales para desarrollar el
análisis crítico en base a lecturas.
Algunas
de las ventajas, recogidas de varios autores, las recopiló
López et al. (2017): incitan la autonomía en el
estudiante; optimizan las habilidades sociales; cuentan con una
versatilidad de formatos (textos escritos, textos orales,
audiovisuales); difunden contenidos propios; se crean comunidades
académicas y favorecen la cercanía con el estudiante. Es
así, que las redes sociales además de presentar un
formato atractivo para el estudiante, también demuestran
características óptimas para su desarrollo educativo.
Sin
embargo, no se debe olvidar que la utilidad de las redes sociales como
un material llevado a las aulas también posee sus desventajas y
riesgos, por lo que es fundamental que la aplicación de estas
plataformas, en el sector de la educación, se den tomando en
cuenta toda una planificación, paso a paso, percatándose
de las características del grupo al que se dirige y de la
realidad de la institución en la que se desenvuelve
(Díaz, 2019). Por lo tanto, el docente debe comprometerse a
conocer este mundo digital para evitar que sus estudiantes caigan en
cualquier situación negativa.
El reto de involucrar al docente en un mundo digital
Si
bien, dentro del escenario de una clase, el estudiante es el actor
principal del proceso de aprendizaje, el docente también debe
verse involucrado. Maldonado (2018) plantea que la inclusión de
las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en
un aula de clases no es suficiente, es necesario que los docentes se
involucren con las herramientas, las hagan suyas y, de esa manera,
puedan conocerlas para optimizar su uso, con el fin de lograr el
desarrollo de competencias en sus estudiantes. Por lo tanto, se
necesita que el docente esté informado, que conozca la
virtualidad y el mundo en que sus estudiantes se desenvuelven para
extraer lo mejor de él en sus clases.
Sobre la experiencia de YouTube e Instagram para los lectores
Las
redes sociales presentan características que les permiten
distinguirse unas de otras. Según López et al. (2017),
“A la hora de emplear las redes sociales como herramienta
educativa, hay que tener en cuenta una serie de cuestiones como son la
tipología, la estructura, las medidas de seguridad que se deben
adoptar y los objetivos que se persiguen” (p.78). En ese sentido,
el docente deberá analizar las más adecuadas a su
propósito. A continuación, se detallarán algunos
rasgos de las redes sociales que son los más consumidos por el
público lector y que pueden ser de utilidad para el desarrollo
de la lectura crítica.
YouTube
es una red social destinada a compartir videos, existe un gran impacto
en el sector educativo, pues fomenta la producción de materiales
audiovisuales que servirán de forma positiva en los estudiantes
(Tapia et al, 2020). Así, se considera que este impacto se vale
gracias al formato audiovisual, edición atractiva y
dirección a cargo de personas afines a los propios estudiantes,
es decir, otros jóvenes. Esto dará como resultado que se
cree una comunidad lectora digital.
Algo
a tener en cuenta, es que hoy por hoy existen personajes como los
booktubers quienes han cobrado un espacio importante en esta red, pues
su contenido es netamente sobre libros que más les llaman la
atención, ocasionalmente, presentan reseñas de novelas o,
incluso, fomentan la escritura de sus propios ejemplares.
Vizcaíno et al (2019) manifiestan, por ejemplo, que los canales
de Youtube Javier Ruescas y Fly like a Butterfly, exponen sus productos
literarios que sirven como inspiración para sus seguidores.
Así, vemos una influencia positiva, que siendo direccionada
pedagógicamente podría convertirse en una fuente mucho
más enriquecedora para el mundo universitario y sus exigencias.
Instagram
ha cobrado mucha popularidad en los últimos años y parece
haberse convertido en el espacio favorito de los más
jóvenes. La particularidad que ofrece esta plataforma frente a
otras redes sociales es su carácter netamente visual, con una
fotografía destinada a presentar la lectura de una forma
atractiva al lector.
Según
Quiles (2020) dentro de esta red social existe una comunidad de
bibliófilos que comparten su afición por los libros desde
lo estético, compartiendo imágenes diarias que forman
catálogos enteros para que otros lectores puedan disfrutar de
sus recomendaciones.
Si
para YouTube existen los booktubers, para Instagram se presentan los
bookstagrammers. Un aporte interesante que realizan estos personajes es
que, además de persuadir al público a leer,
también comparten sus espacios literarios como libreros,
escritorios, apuntes, que al mostrarse de una manera tan atractiva
influencian a los demás por tener o contar con un espacio
parecido.
Como
resultado, se observan jóvenes que además de interesarse
por la lectura, quieren seguir hábitos que disfruta un lector.
De esta manera, se podría empezar a fomentar la lectura
crítica, debido a que esta práctica no solo se presenta
en textos formales continuos, sino también en textos
discontinuos que van acorde a la temática de esta red.
Según
Espinoza et al, (2017), “las redes sociales no se han quedado
atrás y tienen a Facebook como su principal exponente, espacio
que se ha convertido en una posibilidad de interacción para la
educación” (p.135).
Esto
porque se desenvuelve de manera visual y audiovisual, según
corresponda la situación. Además, cuenta con muchas
funciones que permiten, entre las más importantes, crear
perfiles destinados a diversos intereses en particular.
En
esta red social se utilizan los botones como “me gusta” o
“me importa” que permiten calificar una publicación
sin la necesidad de escribir algo en particular. Es una nueva forma de
comunicación que hoy en día es parte del mundo digital.
En pocas palabras, se podría acceder de manera fácil a
contenidos que antes solo se encontraban en determinadas páginas
de búsqueda, transformar una aplicación de
entretenimiento como Facebook para difusión de
información seria y de calidad es posible con la
supervisión de un docente.
CONCLUSIONES
No
cabe duda que actualmente se vive en una era digital, por lo que es
impensable que la educación esté desligada de esta
realidad.
Cordeiro
(2018) hablaba de que la inclusión de las redes sociales en el
proceso de enseñanza –aprendizaje todavía
está en construcción, pues necesita de tiempo para que se
desarrolle de una manera natural y lograr que los profesionales del
sector educativo se vean interesados en utilizar estas plataformas,
como nuevas herramientas educativas en sus aulas.
Es
importante señalar que esta necesidad se justifica debido al
perfil con el que cuenta el nuevo lector, que si bien es cierto
demuestra un interés por la lectura; ya sean booktubers o
instagrammers, todavía no presentan espacios virtuales para
discutir tipos de textos más centrados en su vida universitaria.
Por eso, el propósito de este artículo fue difundir las
herramientas y estrategias más importantes para promover el
desarrollo de la capacidad crítica de los estudiantes, por medio
de una educación ligada al contexto virtual y tecnológico
que actualmente se vive.
En
este proceso de inclusión de las redes sociales al escenario
educativo, también se ven involucrados de manera directa los
educadores. Espinoza et al (2017) mencionan que los docentes no juegan
un rol secundario en este proceso, pues son ellos, en la mayor parte de
los casos, los responsables de que esta nueva educación digital
tenga éxito.
Por
esta razón, en el presente artículo también se
invita a los docentes a considerar las amplias ventajas que involucra
trabajar en la era digital y la relevancia de mantener una permanente
capacitación y actualización en materia de
tecnología, a fin de potenciar su uso y propiciar la
construcción de aprendizajes significativos en los estudiantes.
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