LA RETROALIMENTACIÓN ORAL O ESCRITA PARA MEJORAR LA PRODUCCIÓN ESCRITA EN LA UNIVERSIDAD

ORAL OR WRITTEN FEEDBACK TO IMPROVE WRITTEN PRODUCTION AT THE UNIVERSITY
DOI: https://doi.org/10.33539/educacion.2021.v27n1.2366
Esta obra está bajo licencia internacional https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Fecha presentación: 13-04-21
Fecha aceptación: 01-07-21

CÓMO CITAR:
Trejo Sare, J. E. (2021). La retroalimentación oral o escrita para mejorar la producción escrita en la universidad. Educación, 27(1), 79-83. https://doi.org/10.33539/educacion.2021.v27n1.2366
RESUMEN
El objetivo de este artículo es dar a conocer la importancia de la retroalimentación oral o escrita, de manera presencial o utilizando la tecnología, como estrategia didáctica que puede ser utilizada por los docentes, para ayudar a los estudiantes universitarios a mejorar su escritura académica. Las dificultades que afrontan dichos estudiantes para producir textos académicos son un problema que, si no es tratado por los docentes, ya sea repensando sobre sus estrategias, investigando sobre otras nuevas, y sobre todo actuando, puede influir severamente en el desempeño del estudiante a tal punto que lo puede inclinar a la deserción.
Teniendo en cuenta la problemática, se explica cómo la retroalimentación, que es parte de la evaluación formativa, permite lograr el aprendizaje significativo, pues no solo es una revisión de errores sino una manera de evitar cometerlos en el futuro. Para ello, teniendo como base algunas investigaciones como las de Cuevas-Solar y Arancibia, Padilla y López, y Álvarez
PALABRAS CLAVE:
Retroalimentación, escritura académica

ABSTRACT
The objective of this article is to publicize the importance of feedback (oral or written, in person or using technology) as a teaching strategy that can be used by teachers, to help university students improve their academic writing. The difficulties that university students face in producing academic texts is a problem that, if not treated by teachers, either rethought about their strategies, researching new ones, and especially acting, can severely influence the student’s performance to such an extent that he or she may be inclined to dropout.
Taking into account the problem, it explains how feedback, which is part of the formative assessment, allows meaningful learning to be achieved, as it is not only a bug review but a way to avoid making them in the future. To do this, based on some research such as Those of Cuevas-Solar and Arancibia, Padilla and López, and Alvarez and Difabio de Anglat, proposes the ideal characteristics of a feedback that facilitates the improvement of academic writing: application of feedback and feedforward, personalized, multidirectional and innovative.
It also details the positive results of this strategy in the performance of academic writing. And finally, the importance of applying feedback is made known as a simple strategy to apply by teachers to achieve the goal of the student developing his or her ability to produce academic texts.
KEYWORDS:
Feedback, academic writing

INTRODUCCIÓN

Escribir textos académicos que se exigen en el nivel universitario no es una actividad sencilla. No lo es para los estudiantes que recién ingresan al pregrado ni para los que están en posgrado. Estas dificultades tienen una gran repercusión en su desempeño que, tal como lo afirma Álvarez (2018), han ocasionado una alta deserción en las universidades de diversas partes del mundo. Es decir, es un problema que se presenta de manera recurrente en el nivel superior, solo que en algunos lugares en menor o mayor grado.

De la misma manera, no es fácil la labor del docente para lograr que un estudiante universitario escriba textos académicos. Las razones pueden ser que no saben cómo hacerlo y, por ello, algunos optan por lo más práctico (pero nada profesional) que es no revisar concienzudamente los textos sino solo por la cantidad de información. Sobre esto, nos explica claramente Tapia et al. (2003, citado en Aguilera y Boatto, 2013) que algunos docentes califican los textos por la cantidad de hojas escritas que por el sentido de este y el análisis crítico del estudiante.

Otra razón sería que están aplicando estrategias que no logran que el estudiante escriba según las exigencias académicas y que sea consciente de sus errores para ya no volver a cometerlos.
Así, hay docentes que solo revisan la forma, es decir, la gramática, la sintaxis, el uso de conectores, etc., pero no la coherencia ni la lógica del texto; tal como lo sostienen los hallazgos de Álvarez y Difabio de Anglat (2018), la mayoría de los comentarios de los docentes hacia los escritos académicos de sus estudiantes son de tipo textual (marcadores del discurso, léxico, concordancia, conjugación, etc.).

Otra razón es que algunos docentes asumen que los estudiantes de pre y post grado ya deben ser redactores autónomos, por lo que no toman acción para superar ese problema. Sin embargo, se debe tener en cuenta que el nivel superior es un mundo diferente, un nuevo entorno cultural, pues se debe escribir documentos que en la escuela no se suele desarrollar. “Debe enfrentarse a géneros discursivos que nunca antes ha escrito…” (Navarro, Uribe, Lovera y Sologuren, 2019, p.77), por ejemplo, los ensayos, los informes de investigación, los artículos científicos, etc.

Sobre esto último apunta Álvarez (2018), son alumnos que han de incorporarse al campo científico y a la investigación de un tema de alto nivel de competencia profesional.

Sea como fuere la situación en la que se encuentre un docente, es necesario encontrar una metodología que los apoye a combatir el problema.

Al respecto, se han realizado varias investigaciones que proponen que la retroalimentación experta a los escritos puede ser beneficiosa para el mejoramiento de la escritura. Por ello, el presente artículo busca dar a conocer la importancia de la retroalimentación oral o escrita, de manera presencial o utilizando la tecnología, como estrategia didáctica que puede ser utilizada por los docentes para ayudar a los estudiantes universitarios a mejorar su escritura académica.

La retroalimentación como estrategia para la mejora de la escritura

La retroalimentación es una estrategia que es muy útil para poder hacer notar y explicar al estudiante sobre sus errores, permitir que los corrija y así lograr el aprendizaje esperado. Es decir, aplicar una evaluación formativa y un aprendizaje significativo.

Al respecto, Cuevas-Solar y   Arancibia (2020) dicen que: “La retroalimentación es una de las herramientas instruccionales más poderosas, pues permitiría cerrar la brecha entre el desempeño actual del estudiante y el esperado durante el proceso de aprendizaje, lo que Vygotsky denomina “Zona de desarrollo próximo”. (p. 34)

La retroalimentación escrita, que se ha estado aplicando para asesorar a los estudiantes en la mejora de la escritura de sus textos, es de mayor beneficio para ellos si no solo se realiza de manera unidireccional entre docente y estudiantes, sino también, entre pares o estudiantes.

Asimismo, se convierte en más significativa si se realiza no solo con el objetivo de revisar un trabajo ya finalizado, detectar y corregir errores o señalar aciertos, el llamado feedback; sino, para orientar, apoyar y estimular al estudiante en su aprendizaje posterior, el llamado feed forward. (Canabal y Margalef, 2017)

Al respecto, teniendo como base los resultados de diversas investigaciones se podría proponer una lista de las características idóneas que debe seguir una retroalimentación para ser más eficiente en ayudar a los estudiantes a superar sus dificultades para la escritura.

Características idóneas de una retroalimentación para fortalecer la escritura académica

El tipo de retroalimentación que se propone, y que tiene como sustento las diversas investigaciones en las que se ha aplicado, debe presentar las siguientes características:

 a.    Realizarse en base a comentarios que expliquen sobre qué partes del texto se deben corregir (feedback); y a la misma vez, proveer información clara como las sugerencias o preguntas, que le permitan repensar y mejorar su escritura (feedforward de calidad). En otras palabras, debe “no sólo ser un comentario positivo o negativo, sino ser a la vez un medio que guíe al aprendiz hacia una mejora constante de sus habilidades y capacidades.” (Cuevas-Solar y Arancibia, 2020, p.35)

b.    La retroalimentación se puede   realizar no solo de manera unidireccional, sino, también multidireccional, mediante comentarios verbales o escritos. Asimismo, se puede realizar mediante la presencialidad o virtualidad, por lo que no es imposible ni difícil de hacerla. En ese sentido, Padilla y López (2019) sugieren que esta puede realizarse entre docente y estudiante, y entre estudiantes de manera colaborativa; asimismo, de manera presencial u oral o utilizando la tecnología.

c.    Por otro lado, la retroalimentación debe ser personalizada, teniendo en cuenta el perfil de cada escritor, es decir, si es novato o experto. Según esto, es que se insistirá a unos con más comentarios sobre la reformulación del sentido del texto; a otros con algunos detalles de forma o estructura; y a otros con ambas dificultades. Para que dichos comentarios puedan ser bien recibidos por los estudiantes, estos deben ser “…comprensibles, selectivos, específicos, oportunos, contextualizados, sin prejuicios, equilibrados, transferibles y personales”. (Padilla y López, 2019, p.336)

d.    La retroalimentación se puede adaptar utilizando la tecnología. Una propuesta innovadora que presentan Padilla y López (2019) es el uso de los comentarios digitales, llamados CEDs. Estos se pueden realizar mediante el uso del “control de cambios” o “insertar comentarios” del Word, los screencast que son parecidos a las videollamadas, y, también, mediante programas automáticos como los scripts de retroalimentación que ya tienen prediseñados un banco de comentarios electrónicos.

Resultados positivos de la retroalimentación para mejorar las habilidades de escritura

Se realizaron investigaciones sobre cómo la retroalimentación en la escritura es percibida por los estudiantes, qué expectativas tienen los docentes sobre esta al aplicarla, y cómo ha influido en mejorar las habilidades de escritura. Sus resultados nos llevan a conocer, de alguna manera, cuál es el efecto de esta estrategia de evaluación formativa.

La investigación de Cuevas-Solar y Arancibia (2020) titulada Percepciones y expectativas de docentes de ingeniería y educación en torno a la retroalimentación en tareas de escritura, realizada en una universidad perteneciente al Consejo de Rectores de la Región del Biobío, analizó las percepciones sobre cómo es recibida la retroalimentación por los estudiantes y las expectativas de los docentes de Ingeniería y Educación al realizar la retroalimentación de los trabajos escritos de dichos estudiantes.

Sus resultados nos dan a conocer que los docentes al ejecutar la retroalimentación lo han hecho con la expectativa de que sus estudiantes comprendan los comentarios y reflexionen en torno a ellos; y que, según sus percepciones, dichos comentarios les han servido para corregir los errores de sus escritos o evidenciar cómo están avanzando, y así lograr mejorar sus habilidades de redacción.

La investigación de Guadalupe Álvarez e Hilda Difabio de Anglat titulada Retroalimentación docente y aprendizaje en talleres virtuales de escritura de tesis analizaron la retroalimentación del docente en la producción académica de los estudiantes de un taller virtual de escritura de posgrado y los cambios que estos lograron enla redacción de los documentos. De los tipos de comentarios que se realizaron, los que eran sugerencias o preguntas tuvieron un efecto más constructivo y significativo, pues permitieron que el estudiante razone y analice lo que ha escrito y, así, reformule sus documentos.

La investigación de Constanza Padilla y Esther López titulada Prácticas de retroalimentación en aulas universitarias de Humanidades: comentarios digitales docentes y perfiles estudiantiles de escritor sustenta cómo la retroalimentación electrónica, a través de los CEDs (comentarios electrónicos digitales) se puede realizar de manera efectiva y provechosa para los estudiantes, siempre y cuando se tome en cuenta el perfil de cada escritor (novato o experto) y que los comentarios les permitan analizar y mejorar sus escritos en fondo y forma.

Es decir, la retroalimentación escrita de manera, clara, detallada y puntual es bien aprovechada por los estudiantes en cualquier formato digital. Esto concuerda con lo que afirman Padilla y López (2019): “…uno de los propósitos que persiguen los CEDs: dar orientaciones para que los estudiantes principiantes, en tanto escritores inexpertos, puedan ingresar a su comunidad de práctica mediante la realización de ajustes necesarios para que el texto producido resulte aceptable dentro de esta.” (p.350)

Importancia de la Retroalimentación

Las investigaciones han demostrado la importancia de la retroalimentación de calidad para el aprendizaje de la escritura académica en la universidad. Es decir, es una estrategia didáctica recomendable cuando brinda comentarios que permitan que el estudiante se dé cuenta de sus errores y les permita mejorar sus textos; además, que sean personalizados pues los tipos de escritores son diversos y con necesidades diferentes.

Tal como lo afirma Álvarez (2018), la retroalimentación es importante porque puede potenciar el aprendizaje siempre y cuando ocurran estos tres componentes: apreciación del trabajo escrito, ya sea mediante un comentario o pregunta; explicación de los criterios usados para la revisión; y una acción del alumno respecto a lo que ha aprendido para modificar y mejorar el texto (feedforward).

La retroalimentación oral o escrita es importante porque incide positivamente en el proceso de escritura de los estudiantes, pero, también, porque es un método sencillo para los docentes, pues se puede realizar desde cualquier lugar, de manera virtual, utilizando la tecnología. Así, se puede enviar los comentarios digitales por correo, Googledocs, archivos de video, etc.

La retroalimentación es de gran ayuda para los docentes, que se dedican al dictado de cursos de redacción o escritura académica en la universidad y que siempre están buscando perfeccionar sus estrategias metodológicas. Sin duda, esta es una buena alternativa, que se puede adaptar según el curso que se dicte y según el enfoque de la carrera profesional. Es una actividad ardua que demanda darse un tiempo para leer los textos de los estudiantes; y, luego, encontrar las palabras exactas, claras y necesarias para escribir los comentarios. Pero es   reconfortante   cuando se observa que la estrategia está logrando resultados de cambio y mejora.

CONCLUSIONES

En este artículo, se propone a la retroalimentación como una estrategia metodológica que pueden aplicar los docentes para combatir a las dificultades de escritura académica de sus estudiantes. Sin embargo, si es mal empleada, no logrará cumplir con las expectativas ni será bien aprovechada para el aprendizaje de sus estudiantes.

Por ello, se ha planteado, teniendo como referente a los resultados de diversas investigaciones especializadas, las características que debe contener una retroalimentación para que sea efectiva. Esta debe proporcionar comentarios que expliquen los errores cometidos, el feedback, y, también, comentarios que les permita razonar sobre estos, y tomar acción para reformular sus textos, el feedforward.

También, se puede realizar de manera multidireccional, pues no solo se recibirá la asesoría del docente sino, también, entre pares; lo que será de aprendizaje significativo para el que escribe como para el que corrige.

Asimismo, los comentarios de retroalimentación que toman en cuenta el nivel de cada tipo de escritor, es mejor comprendido por cada uno de ellos, pues les provee de información específica y detallada para mejorar sus textos. Y, por último, esta estrategia se puede realizar no solo de manera presencial sino, también, mediante la tecnología a través de los comentarios escritos digitales.

REFERENCIAS